Y se terminó como un suspiro, con toda las ganas que el público tenía y toda su supuesta fuerza, nomás los Rockies de Colorado no pudieron ni levantar las manos en una sola ocasión; murieron en su propia casa gracias a la excelente combinación de la artillería nueva y veterana de los Red Sox y a los excelentes pitchers abridores y cerradores, los relevistas dejaron un poco a desear pero al final de cuentas lo que cuenta son los números y aunque después de el segundo partido la diferencia fue menor (después de la paliza del primer partido de 13 a 1 en la cual hasta los aguadores entraron al quite).
Después de la paliza inicial el siguiente juego fue el mas apretado al ganar 2 a 1 pero a la vez fue el más tedioso; el tercero fue el mejor juego de todos, pero por más que lo intentaron y lo intentaron, solo se lograron acercar a un punto (6 a 5), pero el bateo de los Sox los volvió a callar, junto a 50, 000 espectadores en el estadio y terminar 10 a 5 en un juego que se alargó, gracias a los cambios de pitchers, a 4 y media horas.
Finalmente ayer terminó el espectaculo, con emosión, aunque muchos esperabamos que Colorado reviviera al menos un partido para darle emosión al asunto, y casi lo logran al acercarse en la pizarra poco a poco (de 2 -1, a 3-2, a 5 - 4) y en la última entrada pudieron haber respondido, pero el cohete que podía al menos igualar los carteles fue atrapado por el jardinero izquierdo en una de las más memorables atrapadas (el sujeto dejó la mitad de la columna en la barda, pero logró el out; y el siguente y definitivo out se logró al estilo tradicional, a base de strikes por el cerrador de los Soxs. Una celebración agridulce para los espectadores locales que no podían creer la inefectividad de su equipo, que no le sirvió más que para la trivia su racha de 23 partidos invictos para llegar a la serie de otoño.
Serie increible, mejor que la ganada en 2004 (por cierto, en la tercera temporada de la serie Lost hacen un muy buen chiste a cerca de los Red Sox, si sin fans de la serie y del baseball lo van a apreciar enormemente, los demás ni lo intenten); serie en la que el primer Pitcher japonés jugo y ganó un partido de la serie, además de tener al Puertorriqueño Mike Lowel como el jugador mas valioso de la serie, premio ganado con justa razón pues fue el impulsor de dos carreras incluida una con Home Run en el último juego, pero en el tercero también impuso la serie de tres carreras que los alejaron en el marcador así como la última carrera, mientras que el segundo impulso un doblete que puso número al marcador final (extrañamante fue el único que no anotó en el primer partido). Una serie corta que solidifica a los Red Sox como un equipo líder, ya olvidada la maldición del Bambino y con un rooster completamente nuevo (solo siete jugadores quedaban del equipo original que ganó la Serie del 2004 (en la que por cierto tambien barrieron 4-0 a Arizona), en la misma situación se encuentran los Indios de Cleeveland, que esperemos que el siguente año sea el nuestro.
Por el momento a disfrutar el triunfo de la Liga Americana, que al parecer va a seguir con los mejores resultados por un buen tiempo.
PD.- También éste domingo fue la tercera victoria de Buffalo en el Americano, no es gran cosa en particular porque ya no se puede aspirar mas que a no llorar tanto y porque de los dos equipos invictos de toda la NFL, uno esta no solo en la misma Liga, sino en la misma División.
El domingo el juego grande es: Indianapolis Colts vs. New England Patriots, ambos invictos y muy probablemente los que lleguen al Super Bowl en febrero.
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